Cuando se trata de llevar a cabo proyectos de sondeo o distintos tipos de perforaciones, muchas veces el entorno natural o industrial no resulta el más adecuado para realizar un trabajo determinado en condiciones absolutamente favorables para asegurar un éxito en las tareas de perforación. Son entornos que complican de una manera notable la operatividad y hacen imprescindible echar mano de los medios adecuados y la experiencia necesaria para afrontar unas tareas que implican la necesidad de adoptar posiciones peligrosas o trabajar en espacios reducidos.
Nos encontramos entonces con perforaciones sumamente delicadas, ya se trate de hacer un pozo de agua, o de realizar instalaciones más complejas de energía geotérmica, que requieren de una maquinaria muy especializada y ligera, ya que las herramientas más grandes y pesadas no pueden tener acceso, así como de un equipo humano muy cualificado para llevarlas a cabo.